Mi corazón, mi alma, mi ser, te extrañan, yo trato de
reírme, de tal forma que mi risa ahogue el llanto, y que sea tan fuerte que ni
yo misma pueda escucharlo, pero por las noches cuando me puedo reír, mi corazón,
mi alma, preguntan por ti, siento que me desvanezco, porque no tengo nada que
decir.
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario