Empiezo yo, diciéndote que ni te amo, ni te adoro, ni te quiero, sino que te odio con todas mis fuerzas. Que sin ti, estaría tan feliz como ahora, que aunque estuvieras nada iba cambiar. Porque no eres guapo, y menos lindo. Tampoco eres dulce, ni nada parecido a cariñoso. Sobra decir que para nada eres perfecto, y tampoco que tengas algo que te haga especia

No hay comentarios:
Publicar un comentario